Publicidad WOKE, una amarga realidad
Capitalizando la consciencia e injusticia social.
La publicidad WOKE se ha convertido en una tendencia cada vez más popular en los últimos años. Las marcas están utilizando este enfoque para mostrar su compromiso con temas sociales y políticos importantes. Sin embargo, hay quienes argumentan que esta estrategia es solo una forma vacía de capitalizar la conciencia social y no tiene un impacto real en la sociedad.
En primer lugar, es importante entender qué es exactamente el movimiento WOKE. El término se originó en la comunidad afroamericana y se refiere a estar consciente de las desigualdades sociales. En el contexto de la publicidad, ser WOKE implica que una marca reconoce y aborda los problemas sociales relevantes en sus mensajes y acciones.
Una de las críticas más comunes a la publicidad WOKE es que muchas marcas solo lo hacen por motivos de lucro. Utilizan temas de justicia social como una estrategia de marketing para atraer a un público más amplio y aumentar sus ventas. Esto puede llevar a una falta de autenticidad y a que las acciones de la marca no sean respaldadas por un verdadero compromiso con los problemas que están abordando.
Campañas publicitarias distópicas, hipócritas y nihilistas.
Algunas marcas pueden caer en el "lavado de imagen" al utilizar la publicidad WOKE. Esto significa que, aunque pueden promover mensajes de justicia social en su publicidad, sus prácticas comerciales internas no reflejan realmente esos conceptos. Esto puede llevar a la percepción de que la marca solo está tratando de mejorar su imagen sin hacer cambios reales en su forma de operar, una hipocresía total.
Dominion Graphics, como empresa, ha adoptado una posición firme al no respaldar marcas o empresas que apoyen este movimiento progresista. Esta postura refleja nuestro compromiso con la coherencia entre los valores promovidos y las acciones reales. No participamos ni brindamos apoyo a ninguna marca o empresa que respalde dicho movimiento. Somos una empresa cristiana y no apoyamos ideologías que consideramos alejadas de nuestros principios cristianos.
Si bien reconocemos la importancia de estar conscientes de las desigualdades e injusticias sociales, no creemos que la solución sea crear campañas publicitarias distópicas, hipócritas y nihilistas. En última instancia, la publicidad debe equilibrar la conciencia social con la autenticidad. No debería dejarse influir por agendas políticas e ideológicas, como la Agenda 2030.
Las marcas deben ser conscientes de su impacto y asegurarse de que sus acciones respalden sus mensajes de manera genuina. La autenticidad y la coherencia son fundamentales para construir una relación sólida con los consumidores y para contribuir positivamente a la sociedad. En Dominion Graphics, nos esforzamos por mantener esta integridad en todas nuestras actividades de comunicación.
Consumidores más atentos a las acciones de las marcas.
Es importante que las marcas en general, sean transparentes y coherentes en sus acciones. Esto implica que sus prácticas internas estén alineadas con los valores que promueven en su publicidad. Los consumidores están cada vez más atentos a las acciones de las marcas y pueden ser escépticos si perciben falta de autenticidad. Es importante encontrar un equilibrio para abordar temas sociales sin perder de vista la calidad y la veracidad en la comunicación publicitaria.
Citaremos algunos ejemplos de la publicidad WOKE, cuando se crean desde las entrañas de una ideología, causando un grave daño tanto a la marca como a la empresa.
El boicot a Bud Light de 2023 fue una respuesta negativa que surgió después de que la compañía Anheuser-Busch, específicamente su marca Bud Light, patrocinara a una actriz y personalidad de TikTok como parte de una campaña para abordar la disminución de las ventas de Bud Light y atraer a audiencias más jóvenes. Una mujer transgénero, promocionó la marca de cerveza Bud Light durante el torneo de baloncesto universitario March Madness. Sin embargo, este anuncio provocó una reacción negativa.
Como resultado, las ventas de Bud Light cayeron significativamente en el mes siguiente al anuncio, mientras que las acciones de AB InBev (la empresa matriz de Bud Light) también sufrieron una caída importante. En mayo de 2023, Bud Light perdió su estatus como la cerveza más vendida en Estados Unidos ante Modelo Especial. Este caso sirve como un ejemplo de cómo la aplicación de la tendencia “WOKE” en la publicidad puede tener consecuencias financieras significativas para una marca.
Otro caso y muy reciente es la contratación de una celebridad de internet y activista LGBTI, que actuó como embajadora de la marca Doritos España del Grupo PepsiCo y que solo ha durado 2 días ya que la marca se percató que dicho personaje había realizado comentarios obsenos y depravados en su cuenta de Twitter, que atentan de forma directa a la moralidad y los valores cristianos de la sociedad. Ya se verán las consecuencias financieras que este tipo de contrataciones costará al grupo PepsiCo y a una de sus marcas estrella Doritos.
La publicidad WOKE puede ser percibida como oportunista. Las marcas que se suben al tren de la conciencia social solo cuando les conviene alienar a su audiencia y hoy en día los consumidores son cada vez más escépticos y exigen autenticidad. Si una marca no respalda sus palabras con acciones coherentes, corre el riesgo de ser vista como oportunista y cínica. "De ahí al batacazo, hay un corto plazo"
Las marcas deben recordar que la autenticidad es clave. Solo cuando se construye una relación genuina con los consumidores, basada en valores compartidos y acciones coherentes, la buena publicidad puede tener un impacto duradero y significativo en la sociedad.